Cereza Amarga pt. 2

Domingo, desperté a las 11 de la mañana con las ganas de dormir más tiempo y forzando ese sueño lo más que podía con la sensación de que sea Lunes para salir de casa y sentir aire fresco en mis mejillas pálidas. Desafortunadamente no es así...

Me levante de la cama con mi típica rutina, levantarme, estirarme e ir al baño, cepillarme los dientes y lavar mi cara... ¿En qué momento lloré?

Joder, me veo tan demacrada, con mis ojos un tanto hinchados y la marca de lagrimas en mis mejillas... 

No lo recuerdo, el exceso de marihuana creo que ahora hace que me olvide de lo que hice mientras estaba despierta o no lo sé, ya es a segunda vez que me pasa, no el llorar, sino el olvidar cosas tan de repente... 

Salí de mi habitación para ir a ver a mi mamá que se veía más animada que el día de ayer, platicamos y hasta rió un poco, me gusta a veces ver a mi madre animada, y es algo que forma parte de mi. 

No importa si yo estoy de la mierda, me gusta ver que los demás se la estén pasando mejor que yo, incluso cuando juego cualquier tipo de videojuego, no importa si yo estoy en una mala racha, siempre y cuando los demás vayan bien y yo sea de ayuda. 

Recordé mi celular, me hace falta tener más fuerza de voluntad. 

Lo encendí. 

Más mensajes en todas partes, notificaciones en Facebook, pero fue lo mismo que el día anterior, solo mensajes hablando sobre tarea, los mensajes positivos de la familia y entre otros más secos...

No me sorprendió, solo suspiré y respondí uno que otro mensaje que debía de responder, como el preguntar sobre la tarea y así, por suerte no hace pendiente casi nada pero como me hubiera gustado que fuera algo diferente. No quise responder cortante, pero es que no me siento de buenos ánimos para responder de una manera más positiva a los demás... No lo siento. 

Hay tantas cosas que todavía tengo que hacer, y con gusto lo hago solo para pensar en cosas diferentes.

Desayune tratando de pensar cosas diferentes, hago mis entradas tratando de distraer mi cabeza y escucho música para tener el sonido en mis oídos y me concentré a lo que debo de hacer. 

No tengo nada ya, y todo lo que siento es cruel, esperando. He estado cayendo durante todo este tiempo, y ahora estoy perdida en el paraíso.

He estado creyendo en algo tan lejano, como si yo fuera humana y lo he estado negando, esta sensación de desesperanza, en mí. 

Todas esas promesas que hice sólo para bajar, las personas creen en mi pero estoy rota. Por mucho que me gustaría, que el pasado no existe, aún no, y por mucho que me gustaría sentir como pertenezco a este lugar, solo lo reprimo. 

Espero el día que no sienta este dolor, espero que alguien lo tome con todas las sombras de distancia, porque no me dejan ir...

Y vuelvo a pensar que no tengo nada ahora, que todo el dolor que tengo atorado es solo crueldad...

Son las 6 de la tarde, pocas horas faltan para que este día termine y salga de aquí para sentir la brisa de aire fresco tocar mis mejillas pálidas y mi mala leche se desvanezca.